Vida americana: Influencia de los muralistas mexicanos en el arte estadounidense

El Whitney Museum of American Art, presentó el pasado 27 de febrero, “Vida Americana”, una muestra de gran importancia porque pone en evidencia la influencia que los muralistas mexicanos tuvieron en la obra de los artistas estadounidenses de la época. La muestra fue suspendida temporalmente por la situación de pandemia por el Covid-19 a nivel mundial y será retomada una vez culmine la emergencia.

por Caresse Lansberg

José Clemente Orozco, Diego Rivera y David Alfaro Siqueiros, mejor conocidos como Los tres grandes, crearon escenas monumentales de lucha y de triunfos heroicos, de opresión y de poder del pueblo mexicano. Esta exposición muestra la historia no contada de un intercambio cultural sin precedentes entre los dos países que alteraría el curso del arte estadounidense para siempre.

En los años 20 un cambio profundo se produjo en la sociedad mexicana. Después de 10 años, la guerra civil había terminado y el nuevo gobierno comenzó a promulgar reformas sociales progresistas que empoderaban a campesino y trabajadores; sin embargo este proyecto transformador no fue tan sencillo.

Según la curadora de la muestra, Barbara Haskell, no había en México una cultura compartida ni un sentimiento de identidad nacional. La artista Aliza Nisenbaum señala que para el momento la gente estaba harta de escuchar a otros decirles cuál era su identidad y el artista afirma que el corazón de lo que hacen los artistas pertenece a la gente, y que desean que ésta se involucre y relacione con ideas reales. El gobierno apeló a las artes, y se comisionaron enormes murales públicos que mostraran imágenes de la cotidianidad mexicana. Marcela Guerero, asistente de curaduría, señala que fue así como Los tres grandes, que eran artistas radicales y revolucionarios de su tiempo, aprovecharon este momento para involucrarse y crear obras de grandes dimensiones con escenas nunca antes vistas de la vida y de la lucha del pueblo mexicano; con estas escenas pintadas en tamaños monumentales lograron que la gente pudiera verse representada y se identificara con los personajes de sus obras.

Artistas como Frida Khalo, la fotógrafa italiana Tina Modotti y el cineasta ruso Sergei Eisestein se unieron a la vibrante escena avant-garde que había en México. Pero fueron realmente las imágenes épicas de los murales las que capturaron la imaginación de los artistas estadounidenses.

“Nunca habían visto nada así”, dice la curadora Barbara Haskell, “los periódicos estadounidenses comenzaron a publicar artículos sobre lo que llamaron El renacimiento mexicano, eso hizo que un número considerable de artistas estadounidenses se fueran a México a participar del boom y a aprender.”

Con el cambio de gobierno, los artistas mexicanos ya no recibieron más comisiones y Los tres grandes consideraron irse al norte a buscar trabajo allí. Estados Unidos estaba sumido en la Gran Depresión y el medio de los artistas estaba muy comprometido, no había trabajo, era sin duda un mal momento, sin embargo, los mexicanos comenzaron a reunirse con grupos de artistas que estaban afectados por la pobreza y la hambruna para darles ánimo y entusiasmarlos a desarrollar una nueva visión, un arte que se conectara con la realidad social del momento y que tuviese un rol social.

José Clemente Orozco

José Clemente Orozco fue el primero en llegar, su gran mural comisionado por el Pomona College en California que muestra al mítico dios griego Prometeo, causó sensación. La calidad de esta obra y la fuerza de la expresión era algo nunca antes visto en los EEUU.

Uno de los artistas más impresionados fue Jackson Pollock quien fue a ver el mural en repetidas ocasiones, y llegó a decir que era “la mejor pintura del mundo”. Pollock mantuvo una imagen de esta obra en su estudio durante los años 30. Jacob Lawrence fue otro pintor muy movido e influenciado por esta obra mientras trabajaba en su serie Los migrantes. Lawrence admiraba el compromiso de los muralistas mexicanos con el arte público que tratase temas políticos y sociales.

Diego Rivera

Diego Rivera fue el segundo de Los tres grandes en llegar a EEUU. Él era en ese momento el héroe del mundo occidental que encarnaba el espíritu de la revolución mexicana. Inspirado por sus experiencias en los Estados Unidos, Rivera dio expresión a un arte sobre la nueva industria norteamericana, en un mural para el Instituto de las Artes en Detroit. Su idea de crear una épica nacional fue muy bien recibida entre los artistas. Nadie como él comprendía, el poder de la fuerza de la representación y su impacto en la gente.

David Alfaro Siqueiros

David Alfaro Siqueiros fue el último en llegar, era un radical recalcitrante, para quien había que producir arte no sólo con contenido revolucionario, sino con materiales y técnicas que simbolizaran de alguna manera ese mensaje de revolución. Siqueiros entendió que sus ideas radicales no iban a caer muy bien entre sus patrocinantes americanos. Su segunda comisión “Tropical America” en el centro de Los Ángeles fue encargada para que el artista creara escenas tropicales a lo brasilero pero él, en un acto de rebeldía anti-imperialista, pintó a una figura indígena crucificada. Tropical America fue prácticamente borrado poco después de su inauguración.

En 1936, Siqueiros se mudó a Nueva York en donde estableció un estudio experimental al cual acudieron, entre otros artistas, Jackson Pollock. La experiencia de pintar sin limitaciones y libremente chorreando pintura sobre el lienzo en el suelo, se convirtió en su estilo personal.

Hacia los años 40, Los tres grandes habían ya regresado a México, y continuaron creando obras monumentales, pero el impacto que hicieron continuó reverberando en las obras de los artistas estadounidenses cuyas vidas habían tocado a través de los años, según Barbara Haskell “esta exposición trata de reescribir la historia del arte”, y para los artistas que colaboraron con la muestra, Aliza Nisenbaum y Derek Fordjour la misma es un testimonio de la enorme conexión que existe entre los dos países y ofrece una reflexión oportuna a todo aquel que la vea, especialmente para un momento político como el actual. Eso lo que los artistas buscan con el arte.

Algunos artistas influenciados por Los tres grandes

Fotos cortesía Whitney Museum of American Art

Más sobre la exposición y Los tres grandes

Vida Americana: Mexican Muralists Remake American Art, 1925–1945
Feb 17–May 17, 2020

https://www.diegorivera.org/

Biografía de David Alfaro Siqueiros

Biografía de José Clemente Orozco